Ica y Nazca

Ica- Después de pasar unos días distintos en la capital, volvemos a nuestro ritmo de viaje por la costa peruana. Ica es una pequeña ciudad donde el calor y el desierto es lo más llamativo. Planeamos una salida hasta Paracas para visitar las islas Ballestas, que es una reserva nacional donde hay pingüinos de Humboldt, leones marinos e infinidad de aves. El Candelabro (arriba) Navegando hacia las islas, en el camino ves El Candelabro, un geoglifo que sirve de Faro para los navegantes (está relacionado con las Líneas de Nazca). La excursión se hace corta, pero ver este tipo de animales en la vida salvaje merece la pena. Al día siguiente decidimos ir al único oasis de toda América, el de Huacachina. El oasis, todo hay que decirlo, tiene su parte buena y su parte menos buena. Por un lado, te encuentras con un "minipueblo" donde todo está comercializado, algo que en un oasis...